Primera escena: tu socio te llama para ir de pesca. Segunda escena: tu socio prepara el bote, la red y la conservadora. Tercera escena: pone el bote, la red y la conservadora ¡en el patio de su casa! ¿Cómo se llama la película? Vamos de “pez-casa”. ¿Cómo? Sí, así como suena.

En Honduras, hay una localidad que se llama Yoro y una de las cosas por las que es famosa es la lluvia ¡de pescados! En vez de paraguas tenés que salir con la chupinera mba’e.

El extraño fenómeno, que no tiene una explicación muy científica que digamos, ocurre cada tanto y deja montón de peces tirados por el suelo que es como plata que la gente recoge.

Es que una empresa local que se dedica a enlatar peces les compra a los pobladores hasta 6 dólares por kilo. ¡Pez-casa! Por lo general, este fenómeno se da en mayo, por lo que incluso es explotado como una atracción turísitica.