El ganadero Rómulo Rojas, quien había sido secuestrado en la tarde del miércoles junto con su empleado, en la colonia Hugua Ñandú, fue liberado ayer luego de pasar poco más de un día en manos de sus captores.

El hombre se comunicó con su familia para darles la buena noticia, “ya me soltaron, estoy bien” dijo Rojas en un breve mensaje, que sirvió para avisar de su liberación y en qué lugar se encontraba.

Ni bien se dio la llamada, un grupo de agentes de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) se dirigió hasta el lugar en donde estaba el ganadero, para que este se pudiera reencontrarse con su angustiada familia.

Según el fiscal de caso, Carlomagno Alvarenga, los parientes del secuestrado no pagaron ni un solo guaraní para que el hombre sea liberado.

Rómulo y su capataz Modesto Antonio Alfonso estaban desaparecidos desde el miércoles al mediodía, cuando fueron llevados por cuatro hombres armados al llegar a una estancia de la localidad de Hugua Ñandú, distrito de Paso Barreto, departamento de Concepción.

Para el ministro del Interior, Francisco De Vargas, este nuevo caso de secuestro no tiene relación con el grupo criminal EPP.

La familia está dolida

Aldo Coronel, cuñado del ganadero secuestrado, dijo en conversación con radio Ñandutí, antes de conocerse de la liberación de su pariente, que la familia está muy golpeada.

“Lo único que nos interesa es poder rescatarlo con vida. Lo que puedo decir es que es alguien trabajador, sin enemigos. Estamos muy consternados”, mencionó.

La zona en donde se produjo este nuevo flagelo es territorio de influencia de los grupos criminales EPP y ACA, lo que hace suponer que alguno de estos grupos estaría detrás del caso.