Por más de que se hacen muchas campañas para que loperro entiendan que es un peligro mortal manejar ka’úre, a muchos no hay bala que les entre, he’i el inspector Reinando Giménez, subjefe de la zona Central de la Patrulla Caminera. De 4.145 personas que fueron sometidas al alcotest este sábado y domingo, 308 dieron positivo. La cifra aumentó con respecto a la normal que ronda los 242.

Para colmo, los muchachos de cualquier forma quieren zafar del alcotest y antes de ser sometidos a la prueba meten cualquier cosa en la boca para que el resultado no salga real.

“Antes de someterle muchos ahí en frente del oficial empiezan a meterle chipa, pan, gaseosa, tereré, con la esperanza de que les salga negativo. Pero todo eso es un tabú, no hay nada que neutralice el efecto, porque el alcohol se queda en la sangre, tal vez logre disminuir, pero no desaparece”, he’i.

Relató que hay quienes cuando ven una barrera se dan la vuelta o directamente retroceden, pero para estos casos ellos cuentan con la moto patrulla, que va detrás de los que tratan de escaparse y les hace parar para someterle a la prueba y verificar que todo esté en orden.

Otra cosa que hacen mucho es que al ver la barrera estacionan, se bajan y levantan el capó del vehículo y simulan que se les descompuso algo y cuando se les hace la prueba da positivo.

CONTROL

Todos los fines de semana la Patrulla Caminera hace sus controles sobre ruta en lugares estratégico, a fin de captar a los infractores.

DEMORADOS

El fin de semana también fueron demorados 361 vehículos por varios tipos de infracciones, uno de ellos por alcotest positivo.

MOTOCICLETAS

La Patrulla Caminera  cuenta con motocicletas con tecnología de punta y personal adiestrado, he’i. Graban todo lo que pasa.