Las pulgas aman estar donde hay perros, conejos, gatos en la casa. Una de las razones de su abrumadora presencia en nuestra casa, es el hecho de que los huevos de las pulgas pueden depositarse en cualquier lugar dentro de tu casa.

Estos huevos se convierten en larvas y finalmente en pulgas.

Por la noche, coloca un recipiente o un plato, preferentemente en el medio de la habitación. Colócalo en el piso y llénalos con agua tibia, agregarle líquido para lavar cubiertos. Utilizar una buena cantidad.

Coloca una vela en el centro de cada plato y enciende. Las pulgas son atraídas hacia la luz. Cuando saltan hacia la luz, van a quedar atrapadas en la alta viscosidad del líquido con jabón y atender que queden extinguidas antes de dormirte.