FAMA. Llegó a la fama a muy temprana edad y no supo sobrellevarla

Britney Spears se inició en el mundo de la actuación cuando era apenas una niña, a los 11 años ya se hizo famosa gracias a su participación en The Mickey Mouse Club en 1992.

Con tan solo 17 años de edad, la carrera de la princesa del pop se consolidó al estrenarse su primer álbum de estudio “Baby One More Time”, que se convirtió en el disco más vendido por una solista adolescente. Ahora, con sus 39 años, su vida es más que complicada por culpa de los excesos y el descontrol. Su ascenso como una de las estrellas más importantes de la industria del pop estadounidense cuando era apenas una adolescente, le cobró factura y su carrera se vio en descenso luego de que las presiones de la vida de famosa la llevaran a padecer una crisis de salud mental hace unos años, cuando su padre adquiriera una tutela legal sobre la artista de la que, hasta el día de hoy, ella sigue siendo presa.

Por supuesto, con la presión de la fama y rodeada de un mundo de excesos, Britney se vio rápidamente envuelta en las adicciones. Era constantemente retratada saliendo de antros y bares borracha y según publicó su madre en su libro de 2008, la princesa del pop tenía una adicción al alcohol y a las drogas. Intento de suicidio. Según afirmaron algunos medios en 2007, la cantante, internada ya en una clínica de rehabilitación psiquiátrica, habría intentado suicidarse colgándose con una cortina, aunque no haya pruebas de ello más que los decires de algunos de sus “amigos”.

Más adelante, al enterarse que podría perder la custodia de sus hijos, intentó hacerlo dos veces más metiéndose a caminar entre el tráfico, y tomando pastillas para dormir. Crisis mental y un nuevo look… Tras crisis de ansiedad y depresión, Britney fue internada en diferentes ocasiones en clínicas mentales. Algo que llamó la atención sobre ella, fue que en ese entonces, con sus problemas nerviosos, decidió raparse por completo la cabeza. Desde 2008 y luego de sus crisis nerviosas su padre ganó ante un juzgado la tutela de su hija, lo que significa que él tiene todo el control sobre la fortuna de Britney, su vida personal y laboral.

Fuentes: Milenio