La impotencia y el dolor cada vez eran más fuertes. No solo la desidia provocó una profunda tristeza sino también el clima, que hizo más duro el camino para todos los que tenían que transitarlo.

Don Crispino Miranda, el hombre que desde el jueves siente una terrible humillación junto con el cuerpo de la mujer que le dio la vida, no bajaba los brazos y seguía su lucha ayer para dar cristiana sepultura a quien en vida fuera su madre.

El olvido lo colocó en un lugar de donde no iba a poder salir si no fuera por la ayuda de la presión ciudadana.

Don Crispino logró salir de Puerto Casado con el ataúd de su mamá después de que todo el país sintiera la indignación que él sintió después de que la ambulancia que los debía llevar hasta su comunidad no haya llegado nunca.

Doña Felicita Da Silva, familiar de la fallecida, contó que ya había pasado 24 horas y el cuerpo de doña Juana María Royd nunca llegó.

“Nos dijeron que salió de Puerto Casado en una camioneta y se estaban yendo a Toro Pampa, pero quedaron atascados en el lodo, las lluvias siempre hacen eso, ya no se puede transitar si está así”, contó ayer a Crónica la mujer.

“El descanso aún no llegó para esta familia debido a que ya les llegó el aviso de que si la lluvia sigue, la fallecida tardará mucho más en llegar. Todos ya le estamos esperando acá, es demasiado doloroso ver todo lo que está pasando mi tía después de muerta. Queremos que nuestra tía pueda descansar ya, no puede seguir así”, expresó con profunda tristeza la mujer.

Doña Felicita contó que el cuerpo de doña Juana debía ser trasladado hasta Fuerte Olimpo en donde una deslizadora le estaría esperando para que pueda llegar hasta su comunidad.

SIN SALIDA

Doña Felicita contó que una vez que empiezan las lluvias, todos los pobladores se quedan totalmente aislados y deben esperar hasta que el mal tiempo pase. “Nos quedamos sin salida acá en tiempos de lluvia”, mencionó.

CAMINOS

Doña Abigaíl contó que seguirán reclamando a las autoridades para que se hagan los caminos de todo tiempo para que todos los lugareños puedan circular de manera más rápida cuando la urgencia así lo requiera ndajeko.

Nunca vivieron una situación tan dolorosa como esa, dijo Felicita

Pese a que siempre vivieron en el más profundo olvido, doña Felicita contó que nunca vivieron una situación tan dolorosa como la que viven ahora con su tía fallecida. Explicó que siempre que los lugareños deben ser trasladados se gestionan los medios para que sea de la forma más rápida, pero agregó que esta vez no fue así.

“No se por qué no le trajeron con la deslizadora nomás ya, las camionetas se van a atascar nomás luego porque es tiempo de lluvia”, explicó.

Mencionó que ya habían pasado más de 24 horas con mucha angustia sentados con la tristeza esperando para poder llorarle por última vez a su familiar, quien hasta después de fallecida debe sufrir las penurias de unas autoridades ausentes.

“Hasta el cajón de nuestra tía ya está lleno de barro”

Después de toda la indignación que se expresó por medio de las redes sociales por la situación que estaba viviendo esta familia, autoridades del Inst ituto Nacional de Indígena empezaron a mover contactos para que don Crispino y su madre puedan llegar lo antes posible hasta su comunidad.

Pese a todo el trabajo realizado, eso no se pudo lograr y ese hombre sigue sorteando obstáculos.

“Crispino sigue siendo muy fuerte. Es demasiado triste ver que hasta el cajón de nuestra tía ya esté lleno de barro, no queríamos eso para ella”, lamentó doña Felicita.

Por su parte, Abigaí l Sosa, de Fuerte Olimpo, contó que todos los pobladores de la zona lamentan lo sucedido y lloran las penurias que le tocó vivir a doña Juana.