• SE CURÓ. Alfredo tenía cáncer de tiroides, que ya estaba en una sitú avanzada. Le entregó a Dios y orando en la iglesia se curó por completo, he’i

Un enorme testimonio de fe y esperanza es el que relató para el diario Crónica el señor Alfredo Fretes Sosa (47), a quien el año pasado le diagnosticaron cáncer de tiroides, que empezó a hacer metástasis (se expandió por su cuerpo) y era prácticamente imposible que desaparezca. Él decidió entregarse a Dios y la enfermedad desapareció como por arte de magia.

“En la iglesia escuché una dulce voz que me dijo ‘vos no estás enfermo’”, dijo asegurando que la voz viene de Jesús. “Fue cuando estábamos orando al Señor y en ese momento una señora de mucha fe también me dijo ‘algo especial está pasando contigo’”.

Nuevamente apareció esa voz cuando Alfredo quiso arrodillarse diciéndole “acá no te vas a arrodillar, vas a arrodillarte en el laboratorio luego de que te hagas el escaneo del cuerpo”. Eso dejó sin palabras a Alfredo, quien decidió entregarse por completo a Dios.

Al día siguiente se fue a realizarse el examen tumoral, fue en nombre de Dios a hacerse el estudio y cuando lo examina un doctor se sorprende, porque el cáncer había desaparecido por completo. “‘Qué pasó aquí, esto está mal’, me dijo el profesional”. “‘No sé cómo explicarte, lo que te puedo decir es que tu cáncer es negativo en tu cuerpo’, me dijo y las puertas del cielo se me abrieron”, aseguró.

El año pasado a Alfredo le detectaron un cáncer del 70% en la tiroides, se realizó varias cirugías, pero el tumor seguía e incluso se expandió en el cuerpo. Las esperanzas no eran muchas para él, pero decidió entregarse a Dios y así fue que consiguió curarse, según lo manifestó.

Hijos menores

Don Fretes tiene tres hijos menores y es el sostén de la casa, también se desempeña como catequista.

La Virgen de Fátima intercedió

Alfredo contó que el que le curó fue Dios, pero que también pidió la intercesión de la Virgen de Fátima, de quien es devoto, por lo que cree que ella tuvo mucho que ver para que mejore su situación. También había altas probabilidades de que se queden sin el habla, pero nada de eso pasó.

A partir de esto, su vida de fe está mucho más fuerte he’i, ya que él ahora se encarga de predicar a personas que están pasando por lo mismo que pasó, buscando que su testimonio sirva de ejemplo y esperanza para esas personas.

Otros milagros ya se dieron en su vida

Varios milagros ya se dieron en la vida de Alfredo. También en la de uno de sus hijos, el más pequeño de 4 años.

“Este es el segundo milagro en mi vida, la primera vez hace muchos años tuve un accidente en la moto y no sabían si iba a poder caminar, tenía que entrar a cirugía, pero un doctor de apellido Cubas me había dicho esa vez que si yo tengo fe voy a caminar sin entrar a cirugía y algo raro pasó, antes de entrar empecé a caminar”, recordó muy emocionado.

Su hijo que hoy tiene 4 años ya, cuando tenía 15 días tuvo una infección generalizada, era muy difícil que saliera de eso, pero entregándose al Señor él se curó.