EL INFANTE HABÍA NACIDO CON VARIOS PROBLEMAS, PERO AÚNSIGUE LUCHANDO
Una de las peores noticias que pueden recibir unos padres es la muerte de un hijo. En el Hospital Regional de Encarnación oiko un hecho bíblico, al estilo Lázaro, porque un bebé había sido dado por muerto y enviado directo a la morgue. La señora Librada Ruiz Díaz (29) y don Julio Servián (64) llevaron a su pequeño de solo 4 meses de vida porque la criatura había nacido con varios inconvenientes de salud. Los doctores de la Urgencia utilizaron todos sus conocimientos científicos para tratar de salvar al pequeño Luis, pero ocurrió lo peor, o fue eso lo que eso creyeron. El cuerpecito fue llevado hasta el depósito de cadáveres y le entregaron el certificado de defunción rubricado por la doctora Elisa Núñez.
Los familiares fueron hasta la Gobernación para gestionar un cajoncito y al volver para retirarlo al “angelito”, se dieron cuenta que respiraba. “Vine para retirar el cuerpo del bebé, había sido que nomanói ra’e y le encontramos que orrespirá la mitã”, he’i la mamá a Itapúa Noticias. En tanto que don Julio añadió, “yo le tenía al bebé y le dije a la doctora, este al parecer nomanóiti doctora, la doctora lo revisó y me dijo que su cerebro ya no trabajaba”.
¡Un rato después vengo otra vez a hincharle a la doctora, hay duda, hay duda le dije. Nos fuimos a la morgue y allí me dijo que eso era efecto de las drogas, que no era respiración lo que salía”, contó el padre.
EL DATO
FALLA MULTIORGÁNICA
El papel de defunción certificaba falla multiorgánica como la causa de muerte del infante. Por lo visto, Ñandejára le dio otra oportunidad de vida a este inocente.
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