Si te gusta el rock, conocés Nirvana y sí o sí vicheaste la portada del album «Nevermind», disco icónico que marcó la generación de los 90s. En la portada se ve a un bebé «como Dios lo trajo al mundo» queriendo agarrar un billete de un dólar bajo el agua.
Bueno, la cuestión es que poco y nada se sabía de ese bebé de cuatro meses hasta hoy en día. Se trata de Spencer Elden, que a sus 30 años realizó feroz demanda a la banda por «explotación sexual y pornografía infantil».
Según cuenta, sus papás nunca firmaron ningún documento para que se use su imagen en el álbum y la banda había prometido cubrir sus «partes» con un sticker. «Las imágenes expusieron la parte íntima del cuerpo de Spencer y mostraron lascivamente los genitales de Spencer desde que era un bebé hasta la actualidad», declaran los documentos legales presentados en California.
El joven está reclamando una indemnización de US$150.000 de cada uno de los 15 acusados, que incluyen a los miembros sobrevivientes de la banda.
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