Que Evo Morales es un fanático del fútbol ya no es novedad. Pero el presi de Bolivia definitivamente se salió del molde al afirmar que premiará “con lo que quieran” a los jugadores de su selección, si estos logran conseguir la clasificación al Mundial de Rusia 2018.

“Si clasifican, pidan lo que quieran. Hay premio”, les dijo el mandatario a los jugadores en un desayuno en el Palacio Quemado, de La Paz. El seleccionador, Julio César Baldivieso, le obsequió después con una camiseta de color verde con el número 10 y “Evo” en la espalda. Morales respondió con la entrega de la bandera boliviana como señal de unidad del pueblo boliviano con su seleccionado.

Bolivia recibirá la tarde del jueves en La Paz al seleccionado de Uruguay en el arranque de la eliminatoria sudamericana rumbo al Mundial. Ante las deserciones de Ronald Raldes y Marcelo Martins, Baldivieso optó por convocar a nuevos valores del fútbol boliviano, decisión que es respaldada por los aficionados, que adquirieron con anticipación los 38.000 boletos.

“Estamos motivados todos, con muchas ganas de que llegue el jueves. Lo que más me preocupa es manejar la ansiedad de los futbolistas”, dijo el DT.

Horario continuado

El presidente Morales decretó, a pedido de la Federación Boliviana de Fútbol, horario continuo de laburo para mañana (hasta las 15:00) para permitir que el estadio de La Paz esté colmado de hinchas a la hora del partido (16:00). “Todos esperamos un buen comienzo”, tiró el presi.