El defensor de Emelec de Ecuador nació en la Argentina, pero sus padres son paraguayos.

• POR OSCAR PATIÑO RIVEROS
• @orriveros

“Si crees en lo que haces, si amas lo que haces, tiene su recompensa”, esta frase lo dijo Hernán Crespo, técnico campeón de la Copa Sudamericana con Defensa y Justicia. La historia de Aníbal Leguizamón Espínola tiene mucho de creer en uno mismo, de amor al trabajo, de esfuerzo, de perseverancia y de jamás bajar los brazos pese a las dificultades.

El defensor de Emelec de Ecuador nació en la Argentina, pero sus padres son paraguayos y él ya comenzó los trámites para nacionalizarse.

Crónica habló con él y entre otras cosas contó lo mucho que peleó para convertirse en profesional, lo que significó para él jugar en el Sportivo Carapeguá, su amor por Arsenal de Sarandí, la admiración hacia sus tíos y el gran momento que vive en Emelec.

“No fue nada fácil llegar hasta donde llegué, fueron años de esfuerzo, de sacrificio, de constancia, de mucho trabajo. Esto no hubiese sido posible sin el apoyo de mi familia, el apoyo familiar fue clave”, dijo el zaguero desde la ciudad de Guayaquil.

Aníbal se formó en la Argentina, pero quiere ponerse la albirroja: “Sueño con jugar por Paraguay”, dijo. Hizo infantil en Independiente de Avellaneda, hasta pre-novena. Estuvo en Arsenal de Sarandí, desde la séptima división hasta la Reserva; en esta categoría lo dejaron libre. Luego vino a Paraguay por un año para vestir la casaca de Sportivo Carapeguá, equipo que en ese momento militaba en la División Intermedia.

De allí volvió a la Argentina para jugar en Argentinos de Quilmes que estaba en 4.ª División, estuvo tres años allí. Luego se fue un año a Defensores de Ramallo, que está en la Federal A. De allí fue a Arsenal de Sarandí, en el ascenso, donde se consagró campeón y logró el ascenso a Primera.

Del equipo de sus amores pasó a Emelec de Ecuador, donde en el 2020 le compraron el pase y le hicieron un contrato de 4 años.

LO DIJO

“NO FUE NADA FÁCIL LLEGAR HASTA DONDE LLEGUÉ, FUERON AÑOS DE ESFUERZO, DE SACRIFICIO, DE CONSTANCIA, DE MUCHO TRABAJO”

ANÍBAL LEGUIZAMÓN

Jugador de Emelec

La estrella de Emelec también trabajó en una rotisería ndaje

En sus inicios el futbolista argentino pero de padres paraguayos pasó por varios clubes del ascenso de diversas categorías y todos sabemos que en esas divisiones no se gana mucho, por lo que la gran mayoría de los futbolistas siempre busca un “trabajo extra”, Aníbal fue uno de ellos.

La estrella de Emelec le contó a Crónica que en la Argentina llegó a trabajar en una rotisería porque en ese momento lo necesitaba. “Te cuento que trabajé en una rotisería en la Argentina”, afirmó.

“Fue muy lindo haber jugado en Sportivo Carapeguá”, he’i

Leguizamón sabe lo que es el sacrificio, por eso nunca se olvida de sus orígenes. Jugó un año en el Sportivo Carapeguá, equipo de la División Intermedia, durante su estadía en Paraguay estuvo solo, su familia (esposa e hija) se quedó en la Argentina, algo que él lo califica como una etapa difícil, pero linda al mismo tiempo. “Fue muy lindo haber jugado en Sportivo Carapeguá, nunca me voy a olvidar lo bien que me trataron. Yo fui solo, fue duro, pero me sentí contento porque con lo que gané le ayudé a mi familia”, contó.

“Mis tíos Cafú y Júnior son mis grandes ídolos”

El futbolista de Emelec no fue el primero de su familia en ser campeón con Arsenal de Sarandí, allí jugaron dos de sus tíos, Júnior y Darío “Cafú” Espínola, este último es una leyenda viviente del citado conjunto.

Al ser consultado sobre sus ídolos en el fútbol, él no dudó un segundo en afirmar que son ellos, sus tíos. “Mis tíos son mis grandes ídolos, además aprendí mucho de ellos. Ambos son muy queridos en Arsenal, de hecho ‘Cafú’ es un histórico del club”, apuntó.

El equipo “Eléctrico” hizo uso de la opción y compró su pase

Al llegar a Ecuador, a uno de los grandes de ese país, Leguizamón Espínola sintió que todo el esfuerzo que había hecho valió la pena. Apenas llegó, jugó y lo hizo muy bien, tal es así que su rendimiento fue tan bueno que los dirigentes de Emelec tomaron la decisión de comprar su pase y hacerle un contrato por 4 años.

Barcelona, Liga de Quito y Emelec son los pesos pesados del fútbol ecuatoriano y manejan un gran presupuesto. La cifra que pagaron por Aníbal es muy importante.

“Tenemos un estadio de primer mundo, es algo extraordinario”

El estadio “George Capwell” de Emelec tiene capacidad para 40 mil personas y es uno de los más modernos de Ecuador, Aníbal lo describió como uno de primer mundo.

“Emelec no tiene nada que envidiarle a nadie, tenemos un estadio de primer mundo, es algo extraordinario realmente. La primera vez que jugué allí me impresionó y el club tiene una hinchada que apoya en todo momento. La verdad estoy muy cómodo en la institución y muy agradecido por el apoyo que me han brindado desde el primer día que llegué”, sentenció.