El Decano se reivindicó y superó a Luqueño en un reñido encuentro, que tuvo como figura estelar al juvenil Robert Piris da Motta. Alejandro Silva y Fredy “Zorro” Bareiro hicieron la diferencia en la etapa complementaria

Hizo sufrir pero cumplió. Olimpia estaba obligado a sumar de a tres para subir a lo más alto de la tabla y lo consiguió con mucho esfuerzo. A pesar de que Luqueño logró cerrarle todos los espacios al local, no se vio la mejor versión del equipo de Fernando Jubero, pero aun así fue superior en el primer tiempo y creó las mejores chances.

Una etapa inicial que tuvo a un William Mendieta imparable, creando y asistiendo, pero su participación se vio truncada por una molestia muscular.

La complementaria era una incógnita para la “O”, que ante la ausencia del “10” necesitaba de otras figuras para sacar el partido adelante.

Allí aparecieron dos de los mejores en este semestre, Robert Piris y Ale Silva, para desnivelar la cosa. Justamente el charrúa abrió el marcador. Favorecido por el desvío en el defensor auriazul Gilberto Mendieta, metió la pelota al fondo del arco para tranquilidad del local.

El “Kure” se vio obligado a salir a buscar el empate; mientras Olimpia iba por más para liquidar el pleito, que recién pudo hacerlo a poco del final.

Pelota recuperada por Piris para que Jorge Salinas meta entre líneas un pase preciso a pedir de boca del “Zorro” Bareiro, quien colocó el balón al fondo de la portería auriazul para sentenciar la historia.

Sin brillar mucho y con mucho sufrimiento, la Franja hizo lo suyo y llegó a la punta del torneo.

EL VALÉCHO, Robert Piris

El volante fue determinante en los dos goles franjeados, asistiendo y cortando en momentos justos. Mención especial al trabajo de Ale Silva, quien en el segundo tiempo fue clave.

EL ÁRBITRO, Ulises Mereles

Luces y sombras en la labor arbitral. A un primer tiempo de regular para bien, se le complicó en la complementaria y hasta dejó pasar un penal claro a favor de Sportivo Luqueño.

GALERÍA

Pedido especial. Este pequeño hincha franjeado hizo el aguante desde el primer minuto y solo pedía el guante de Diego Barreto, por medio de este cartel.

Infaltables. La buena presencia femenina en las gradas es siempre una constante cada vez que juega Olimpia en el “Manuel Ferreira”.

El calor de la hinchada. Los aficionados olimpistas llegaron en masa para apoyar al equipo. Sufrieron, pero gozaron en el final.

Tarde, pero llegaron. El grueso de la hinchada luqueña se hizo sentir minutos después de comenzar el partido, para darle colorido al espectáculo.