Lo que parecía un simple show por parte del portero suplente del Sutton, Wayne Shaw, se transformó en una verdadera polémica. El arquero más gordo del mundo está siendo investigado por si su simpática acción en un partido contra el Arsenal tiene algo que ver con el mercado de las apuestas.
La Comisión de Juego y la Federación Inglesa (FA) está investigando a Wayne, por si su acción en el encuentro de la FA Cup contra el Arsenal está relacionada con las apuestas, después de saberse que una casa pagaba 8 a 1 si un futbolista se comía un bocadillo durante el encuentro.
Shaw admitió saber la apuesta ofrecida por la casa Sun Best. “Estaba todo perdido con el 2-0, así que en el descanso me fui a la cocina y agarré el bocadillo. Era de carne con patatas”, señaló entre bromas el veterano arquero.
Comentarios