Jugó su peor partido en el torneo Apertura y el rival no le perdonó. Cerro Porteño fue un alma en pena caminando por el césped del Defensores del Chaco y Sol de América aprovechó el momento y le hizo tres.

El equipo de Villa Elisa se plantó en todos los sectores del campo de juego y de la mano de Martín Giménez desnudó todas las falencias del conjunto que dirige Gustavo Florentín.

A los 19’ el juvenil Adrián Vargas dejó en el camino a cuatro rivales y al ingresar al área sacó el disparo, que fue magistralmente tapado por Antony Silva. En ese momento el Danzarín ya merecía estar adelante en el marcador, por lo menos por la mínima.

Y a los 35’ Giménez de penal, tras una polémica decisión del juez Cristian Aquino, marcó el 1-0 del encuentro.

En la complementaria los azulgranas intentaron reaccionar, pero cuando parecía que el empate estaba cerca, de nuevo apareció Giménez para anotar el 2-0.

A esas alturas el rostro de los jugadores de Cerro, de su técnico y de los hinchas ya denotaba preocupación, pues el partido se les estaba yendo de las manos.

El golpe final a la intención de reacción que tuvo el Ciclón se produjo a los 21’, cuando Giménez “cerró su noche mágica” al convertir el tercero para Sol, el tercero de su cuenta personal.

A veinte minutos del final, Agustín Silva le tapó un penal a Raúl Cáceres; que no fue sino como el broche de oro de la pésima noche que tuvieron los azulgranas.