Y después de Repetto, el “Mono”. Ricardo Tavarelli dejó de ser ayer “de común acuerdo” gerente deportivo del Olimpia. El presidente del club, Marco Trovato, argumentó su salida al “reajuste económico” que deberá hacer la institución franjeada, tras su eliminación de la Copa Libertadores, y que le privará de percibir una suma millonaria en dólares.

“Estamos agradecidos con él, pero el club debe bajar costos”, aseguró Trovato a medios radiales; mientras Tavarelli dijo que “se termina un ciclo por el momento como gerente deportivo, hay un tema económico y se han sumado algunas situaciones”, le bajó el exarquero.

Talvez la “situación” de la que habla el “Mono” tenga que ver con la iracunda reacción que tuvo la hinchada contra él, por ser el gestor de los refuerzos que trajo al club, sobre todo aquellos jugadores que son resistidos hasta ahora.

“Entiendo al hincha en la frustración de no clasificar. Eso lleva a buscar algún culpable y nosotros estamos expuestos a eso”, concluyó.

SE DEFENDIÓ Fue “una campaña”

Tavarelli se defendió de los críticos que lo acusaron de beneficiarse desde su cargo. “No acepto cuando dicen que soy empresario y gerente deportivo, yo trabajo para el Olimpia, las redes sociales son orquestadas y direccionadas. Hay un Departamento de Fútbol en el que se analizan los refuerzos y el presidente es el que habla con los agentes”, comentó el “Mono”.

Mouche pide laburar a doble turno

Pablo Mouche, que no podrá estar en el chute del sábado ante Capiatá por su expulsión ante Guaraní, tiró ayer que le vendrá muy bien para ponerse a punto y volver para el clásico.

“A pesar de ser una mala noticia, a mí me viene bien para ponerme a punto en lo físico, pedí al profe laburar a doble turno porque yo llegué sin una pretemporada”, aseguró. Agregó que en Olimpia “es una obligación salir a ganar en cualquier cancha y no hay otro objetivo que no sea ser campeón”, subrayó.