• AMOR TOTAL. El sentimiento que despierta el capitán azulgrana va más allá de lo futbolístico. Un fenómeno que se da pocas veces hacia un jugador. Olimpista de nacimiento, ya es un cerrista por convicción

Cuando Juan Rodrigo Rojas Ovelar (28 años) volvió a nuestro país en el 2015 para fichar por Cerro Porteño, lo hizo sin la parafernalia de otros jugadores que llegaron con el rótulo de “estrellas”. Tanto, que su perfil bajo y humildad hicieron pasar casi desapercibido su pasado olimpista, donde supo ser figura antes de ser transferido al exterior.

Hoy, aquello queda como algo anecdótico, porque lo que representa hoy por hoy el talentoso volante para el mundo Cerro es sencillamente inexplicable.

Rojas es el ídolo indiscutido del Ciclón. Su capitán por méritos y ascendencia. Su mejor jugador por clase y calidad y el jugador más querido por la hinchada, lo que no es poca cosa.

Su golazo ante Olimpia y su festejo eufórico, que ya recorrieron todo el continente, terminaron por confirmar que Rodrigo encontró su lugar en el mundo, donde se siente cómodo y es feliz, haciendo feliz a la hinchada más popular.

Basta con echar un vistazo a las redes sociales para entender el impacto social que genera en el fanático azulgrana, que lo tiene literalmente como un dios. Habría que remontarse a la mejor época del “Tigre” Ramírez y más recientemente al de los momentos gloriosos de Jonathan Fabbro, para dimensionar la devoción que genera este jugador que carga la número 8 en sus espaldas y que fue capaz de enamorar a todo un pueblo.

73 PARTIDOS

Lleva jugados en Cerro, entre torneos locales y copas internacionales.

11 GOLES

Convirtió Rodrigo desde su arribo al Ciclón en la temporada 2015.

1 TANTO

Fue su primer tanto en superclásicos, jugando por ambos equipos.