• LAPIDARIO. River habló en la cancha y prácticamente sentenció la serie de octavos con dos goles determinantes. Guaraní, apurado en impreciso, solo puso ganas y nunca ofreció garantías en defensa

SIN RESPUESTA. Es la expresión primaria que se ajusta a lo poquito que mostró Guaraní. El cuadro de Garnero prácticamente se despidió anoche de la Copa al caer 2-0 de local ante River. La revancha existe, pero por lo que se vio anoche, aquella aventura de visitante no pinta muy alentador. Hasta se presume imposible.

River solo necesitó apretar de entrada para meter miedo. Ese respeto que infundió el cuadro de la banda roja fue suficiente para dejar de lado las habladurías al santo cohete que ofrecieron en la previa los dirigentes de ambos clubes. La verdad está en la cancha y eso lo hizo el equipo de Gallardo.

Y eso, que ese inicio a todo trapo no lo transformó en el resultado. Lo hizo cuando ya Guaraní se había plantado mejor, con un tiro libre de Scocco que desvió en Novick para engañar a Aguilar.

Ese 1-0 golpeó mal al Aborigen, que buscó con algunos cambios en el complemento para modificar la historia. Mejoró y el asunto se hizo de ida y vuelta. Arañó el empate, pero también se expuso atrás. Y en ese tren vertiginoso, la visita nuevamente golpeó sobre el final con el gol de Larrondo, que literalmente deja afuera al Cacique.

Andrés Cunha

Buen trabajo del árbitro charrúa. Recibió muchas protestas pero mantuvo la serenidad.

Jorge Moreira

Brutal partido de nuestro compatriota. Un correcaminos punzante. Solo le faltó meter.

LA REVANCHA

El martes 8 de agosto, en Buenos Aires, será la revancha de este partido, de acuerdo al nuevo formato del torneo.

MOREIRA

Figura excluyente, el paraguayo Jorge Moreira, se mostró contento por el triunfo de River. “Hicimos un gran partido, contento por eso. Merecimos ganarlo, contento por el grupo, y ahora a esperar la revancha dentro de un mes para intentar cerrar la serie”, le bajó el lateral.