Incredulidad, decepción, rabia, impotencia. Cualquier calificativo que se le atribuya a lo que le pasó a Nacional, se ajusta a la realidad. La durísima derrota, con goleada ante Cerro Porteño, cayó como milanesa de chancho en campamento del Trico, que podría quedar aún más lejos de la punta, aunque siempre como escolta, si Olimpia logra una victoria sobre el “Inde”.

“Partido malo en todo sentido. Ni siquiera tuvimos la agresividad para este tipo de partidos”, fue la frase contundente que dejó escuchar el técnico Celso Ayala. Para el “Chito”, su equipo jamás estuvo a la altura del partido y hasta dio a entender que sus jugadores parecían acusar cansancio.

Nacional enfrentará justamente al rival franjeado de mañana, Independiente, en la siguiente fecha.