Muy pronto le tocó chutar en Primera, que su compí Javier Ferreira le facilitó su calzado de fútbol para no pelar con el “todo gastadito” que tenía en ese momento.

• Por Gerardo Benítez Monges

De Limpio, directo a Tuyucuá. Y de las divisiones inferiores, casi de cabeza a la Primera. Ese es Ricardo Silva, un expelotero que ascendió pronto en su carrera deportiva, especialmente, jugando por el Guma.

El debut del exnúmero 10, y luego lateral izquierdo, se dio en un abrir y cerrar de ojos que hasta le tuvieron que prestar un par de botines para estar a la altura de sus demás compañeros porque aún no estaba preparado.

“Alcides Báez me hizo debutar en Primera, todo fue muy rápido. Yo jugué un sábado en la infantil, luego me convocaron al día siguiente para la Reserva, y la semana siguiente ya me llamaron para la Primera. El día del partido no tenía botín. O sea… el que tenía era el de siempre, un ‘Arquín’ bien gastado. Los demás compañeros todos usaban ‘Puma’, ‘Nike’, ‘Adidas’, en fin…”, recuerda entre risas Silva.

Para “salvar el pucherón” se le acercó Javier Ferreira, “y me dijo que me prestaría sus botines. Gracias a eso yo debuté con un botín ‘Puma’ de la gran siete! Jajajaja… Gracias al cielo teníamos el mismo calce”.

Silva debutó con el número 10 en la espalda, y ocupó el puesto justamente de Ferreira, quien fue transferido a Colombia.

“Mucho tiempo jugué en ese puesto, pero luego bajé como lateral, cuando Juan Bautista Torales pasó a Guaraní”, indicó.

TERRIBLE

Contó que el rapai de Cerro, Carlos Antonio, el popular “Cha-Cha-Chávez”, fue uno de los que le dieron akãrasy a la hora de marcar, pero más guerra le dio el también brasileño Alex Rossi.

“Chávez era muy rápido, pero lo tenía controlado, con el que tranqué de veras fue con Rossi. Él pisaba fuerte y golpeaba, entonces había que ponerse fuerte también”, dijo.

Chocho por fundar la escuela de fútbol de su querido Guaraní

“Yo fundé la escuela de fútbol del club Guaraní de Limpio, para mí es todo un orgullo. Yo soy del barrio y siempre estoy colaborando con la entidad”, dijo muy contento el exfutbolista, quien se recibió de director técnico de fútbol en el año 2000. “Me gusta dirigir a los más pequeños, me siento cómodo en las formativas. Creo que seré más útil formando chicos para que el día de mañana salgan a aprovechar las oportunidades que se les presenten”, le bajó el cenizo.

“Girardoni sabía fabricar los penales”

Un capítulo especial le dedicó Silva a su excompañero y amigo de siempre Francisco Girardoni, quien falleciera años atrás. “Fue una gran persona, un amigo del alma, nunca lo olvidaré”, dijo un tanto sentido. “Sabía jugar, pero más sabía fabricar penales. Quizás en este tiempo, con el VAR, era otra cosa, pero habrá sido el jugador al que más se le cobró penal a favor”, recordó.

Le vichearon de Estudiantes, pero curiosamente no salió

En el año 1996 Silva pasó de Libertad a Tembetary. “Fue un lindo año ese, el club había ascendido recién y teníamos un equipazo. En el Apertura hicimos un buen papel, pero para el Clausura, casi todos fuimos transferidos a otros clubes”, señaló.

También destacó que estando en Libertad se presentó una oportunidad para ir a la Argentina a jugar. “Me dijeron que Estudiantes LP me estuvo sondeando, pero la directiva liberteña no sé por qué no me dejó ir, se fue otro compañero”, lamentó.

“Logré muchas satisfacciones detrás del fútbol”

Silva formó parte de todo el proceso que tuvo la selección nacional juvenil Sub 23 para el torneo preolímpico de Barcelona 92. El factor suerte no le acompañó y quedó marginado. No obstante, dijo que se siente muy conforme con todo lo que hasta ahora consiguió detrás de la pelota. “No me quejo, logré muchas satisfacciones en el fútbol”, sostuvo.