POR OSCAR PATIÑO RIVEROS

Comenzó a jugar al fútbol de salón a los 7 años y a los 13 ya fue campeón del mundo con la selección paraguaya de este deporte en el certamen que se realizó en España. A los 9 años dio sus primeros pasos en el fútbol de campo y hace dos semanas, con 16, debutó en Primera División con la casaca de Guaireña FC. Su pase es de Libertad y está a préstamo en el equipo que dirige Troadio Duarte.

Se llama Rodrigo Javier Villalba Benítez, nació en Villarrica el 2 de marzo de 2006 y desde muy pequeño le gustaron el fútbol de salón y el fútbol de campo.

Siendo un niño comenzó a practicar fútbol de salón, un deporte donde se destacó en su ciudad natal y en la selección nacional. A los 9 años fue “fichado” por la Escuela de Fútbol A.P.G de Villarrica y desde ese momento le dedicó tu tiempo y esfuerzo a ambos deportes.

Su primera gran alegría la vivió con la selección paraguaya de fútbol de salón al ganar el Mundial Sub 13 que se disputó en España.

En el 2019 Nelson Zacarías y Roberto Paredes, buscatalentos de Libertad, hicieron pruebas en Villarrica, Rodrigo se presentó y con su talento llamó la atención de ambos técnicos, quienes lo trajeron a Asunción para las inferiores del Guma.

“Mis inicios fue en el fútbol de salón, siempre me gustó. Jugué desde los 7 años y a los 13 fui campeón del mundo con la selección paraguaya. A los 9 años comencé a practicar fútbol de campo y cuando la gente de Libertad me seleccionó para sus inferiores yo tenía 13 años y desde ese momento opté por dedicarme 100% al fútbol de campo. Estoy muy feliz con la decisión que tomé”, dijo el atleta en charla con Crónica.

Libertad le cambió la vida, llegar a un club ordenado y de la categoría del Guma a los 13 años fue algo que el pendex hasta ahora agradece, porque le permitió crecer en todo sentido.

“Libertad es un gran club, aprendí muchísimo los años que estuve alli; aprendí lo importante de la disciplina para llegar a los grandes objetivos”, afirmó.

Con el Guma jugó y ganó varios títulos en las categorías Sub 14, 15 y 16 y este año debutó en Primera División, pero con la casaca del club de la ciudad que lo vio nacer; Guaireña FC.

Su historia con el equipo gua´í comenzó en el 2021 cuando hizo de pasapelotas en un partido Libertad-Guaireña FC disputado en “La Huerta” por el torneo Clausura.

“El año pasado, en un partido entre Libertad y Guaireña FC por el Clausura yo estuve de pasapelotas; esa vez le saludé a Troadio Duarte, él me conoce porque fue mi técnico en la Escuela de Fútbol en Villarrica. En esa ocasión me dijo que si se aplicaba la regla del Sub 19 le gustaría contar conmigo y para este Clausura habló con mi papá, conmigo y con Libertad y así llegué a Guaireña. Estoy a préstamo por un año, pero a los seis meses Libertad ya me puede llevar de nuevo”, contó el extremo que juega por derecha y por izquierda.

Su debut en la máxima categoría de nuestro fútbol se dio en la 1º fecha del actual campeonato, “Debuté contra Tacuary, un momento único para mí; estuvieron todos los integrantes de mi familia, la verdad fue increíble. Además mis padres (Saturnino Villalba y Claudelina Benítez) me dijeron que están orgullosos de mi, ellos siempre me apoyaron y me siguen apoyando. La carrera del futbolista no es fácil”, apuntó.

Para él ser jugador de Primera División a los 16 años es un privilegio, pero al mismo tiempo es una gran exigencia e implica mucha responsabilidad. “Es bueno jugar en Primera División, es lo que todos buscamos desde que comenzamos en esto; pero no es fácil, implica mucho sacrificio. Exige buena alimentación, buen descanso, disciplina en todo y mucho esfuerzo. Yo en mi tiempo libre, que casi no tengo, aprovecho para estar con la familia y compartir con mis amigos”, admitió.

Por último añadió que la meta de Guaireña FC es hacer un gran torneo Clausura, pelear por el título y si no se puede ser campeón, buscar llegar a la Copa Libertadores de América del 2023.