POR OSCAR PATIÑO RIVEROS

Comenzó a brillar en Sol de América, pero donde vivió el momento cumbre de su carrera fue en Olimpia, donde en el 2013 jugó nada menos que la final de la Copa Libertadores de América ante el Atlético Mineiro de Brasil.

Hablamos del delantero Enzo Prono, quien dejó General Díaz para ir al Atlante de México. A primeras horas de este miércoles partirá rumbo a territorio mexicano, pero antes de viajar conversó con Crónica.

– Enzo, te vas al Atlante de México, ¿qué significa este paso en tu carrera?

– Ir al fútbol de México es muy importante para mí, el desafío es muy grande y espero llenar las expectativas. Atlante es uno de los grandes de México, más allá de que ahora esté en la Liga de Ascenso.

– ¿Cómo se dio tu salida de General Díaz y la transferencia al fútbol azteca?

– Con la gente de General Díaz quedamos en muy buenos términos, solo tengo palabras de agradecimiento hacia todas las personas del club; ellos me dieron la posibilidad de volver a jugar en Primera División en nuestro país.  En cuanto a lo de Atlante todo se hizo gracias a Diego Serrati, mi representante y amigo. Quiero destacar su trabajo, pero sobre todas las cosas su calidad de persona, él estuvo conmigo en las buenas y en las malas.

– ¿Por cuánto tiempo te vas?

– Me voy a préstamo por un año con opción de compra. Mi objetivo es colaborar para que el equipo vuelva a Primera División. México es uno de los países donde el fútbol es una gran pasión. Uno también tiene ganas de volver a la selección nacional. Ya estuve con Francisco Arce y Gerardo Pelusso, creo que si hago bien las cosas puedo volver a ser tenido en cuenta.

Más datos

Atlante es un club que fue fundado el 18 de setiembre de 1918, actualmente hace de local en el estadio Olímpico “Andrés Quintana Roo” de la ciudad de Cancún, que tiene capacidad para 20 mil personas. El presidente de la institución es Eduardo Braun Burillo.

El plantel está dirigido por el mexicano Eduardo Fentanes. La marca de prendas que utiliza el club es Kappa.

PERFIL. Surgió en Sol de América, club al que le tiene mucho cariño. También tuvo un paso muy importante por Olimpia. Su primera experiencia en el exterior fue con la casaca de Nacional de Sarandí de Argentina