El joven charló con Crónica recordando sus complicados inicios como pelotero para llegar al plantel principal

Por Ricardo Núñez

Fabián Franco recordó sus inicios en el humilde club 14 de Enero del distrito de Jesús de Tavarangue, que está a unos 40 kilómetros de la ciudad de Encarnación, departamento de Itapúa. “En el 14 de Enero hice mi escuela de fútbol. Nos habíamos eliminado del Nacional de Interligas en la Sub17. Luego, de ahí me hice de agallas y vine, desde muy lejos, a probar suerte en las inferiores de Cerro”, historió Franco.

“Quedé en la prueba de las formativas gracias al profe Héctor Núñez, en aquel entonces. Más adelante, incluso también fui convocado para la Albirroja Sub-20. Todo pasó muy rápido”, he’i Fabián.

“Como quedé en la prelista de convocados y no fui al Sudamericano con la Albirroja, Gustavo Florentín me llama para integrar el plantel principal. Fue uno de los días más felices de mi vida porque cumplí mis sueños de llegar a la Primera de Cerro Porteño. Como dije, todo se dio muy pronto desde mi incorporación en las formativas”, soltó el pelotero.

En lo personal me costó mucho adaptarme. Imaginate, dejé a mi familia y vine a Cerro. Fue muy duro al principio porque tuve que vivir en un alquiler, pero todo al final valió la pena”, opinó

El pelotero se anda ganando cada vez más la confianza del “Chiqui” Arce y ya demostró ser un reemplazo de lujo de Alberto Espínola. El mismo intercaló varios partidos con el “Beto” en el campeonato casero, para que este último también pudiera llegar a pleno a los cotejos por Libertadores.

Por consiguiente, el lateral azulgrana indicó sus objetivos para lo que resta de la temporada: “Me gustaría seguir ganando títulos con Cerro y luego, si tengo la oportunidad, partir a un prestigioso equipo del exterior”, he’i Franco, que incluso ya campeonó con el Ciclón, justamente en el Clausura del 2017, en la era de Leonel Álvarez.

El mismo tuvo el privilegio de chutar en aquel recordado último encuentro en la “Nueva Olla” ante Sol de América (3 a 2) y festejar la obtención del título con el plantel principal ante más de 40.000 hinchas. “Fue un partido y un momento único para mí que jamás lo olvidaré. Habíamos hecho una gran temporada”, agregó el mitã’i.

Por otra parte, Franco recordó a sus principales “maestros” desde su llegada al plantel principal ciclónico. “Nelson Haedo, Rodrigo Rojas y Diego Churín fueron los que más aconsejaron siempre. Generalmente me apoyaban mucho antes de cada partido, me decían que siempre esté tranquilo y no tenga miedo. Me ayudaron mucho a crecer en mi juego y también en mi carácter. Estoy muy agradecido con ellos”, le bajó el pelotero. El mismo también reveló a su ídolo personal: “Desde pequeño, siempre me fascinó el juego del brasileño Daniel Alves, por su atrevimiento para atacar y, a la vez, defender. Su pegada también es increíble”, soltó el lateral.