El exvolante de marca recordó sus mejores momentos como pelotero, el mejor jugador que vio, al más difícil de marcar y mucho más.

• Por Juan Vicente Duarte

Rubio y de pelo largo. Zurdo, volante central y de buen pase. Resumiendo: un excelente pelotero y de yapa, fachero. Así era Héctor Martínez (50 años) en su época de jugador de nuestro fútbol. El que fuera mediocampista de Nacional, Libertad, Olimpia y otros clubes, rememoró sus mejores épocas como pelotero.

Nacido en Lambaré, un día, junto con otros amigos, decidieron presentarse a una prueba en Nacional y se daría su inicio. “Tenía 12 años y comencé en la precadete de Nacional, hicieron una prueba y me quedé. En esa época estaban como técnicos el finado don Silvio Parodi con Walter Chamorro”, tiró de entrada.

A Héctor, la posibilidad de jugar en primera le llegó rapidísimo. “Debuté a los 17 años, creo que contra Libertad, donde estaba jugando Carlos Kiese… otro buenito también…jaja”, recordó.

El buen manejo del balón y buen pase, pese a ser un típico volante de marca de la época, fue algo que distinguió a nuestro entrevistado.

“Yo tenía ese plus, porque en esa época era un solo marcador central, donde la disposición táctica era de 4-3-3. Como yo, había otros jugadores como José Domingo Riveros, Gustavo Benítez, el mismo Kiese… ndi, todos “carniceros”, recordó con humor.

Justamente, de esa época, Héctor trae a la memoria uno de los momentos más felices de su carrera. “Jugábamos un partido de Copa ante Olimpia en el ‘Defensores’ y le hice un gol a Éver Almeida desde mitad de la cancha. Hacerle un gol así a un arquero de la talla de Almeida, campeón de América y del Mundo, fue algo fabuloso, que queda en la memoria para siempre”, comentó. Después sería su DT, pero esa es otra historia.

El mejor que vio y el DT que más lo “marcó” en su carrera

Para Héctor no hay dudas cuando recuerda al mejor jugador que vio. “Referente de mi puesto, no, pero Luis Torres (excampeón de América y del Mundo con Olimpia en 1979) fue uno de los mejores jugadores que vi en mi vida, oha’ãkuaa la tipo. Un talento como él nunca ví. Aparte, después lo tuve como técnico de Nacional y era una excelente persona y entrenador, que me enseñó muchísimo”, ponderó.

Sin embargo, un recuerdo especial fue para otro DT. “Wilfrido Garay (ya fallecido) fue el que me dio la oportunidad de debutar en la Copa Libertadores. Me llamó para completar su lista y no le defraudé”.

Gabriel casi le volvió “Loco”

Martínez apuntó a Gabriel González como el jugador que más le costó marcar. “Recuerdo que estando en Libertad se lesionó el lateral izquierdo y el técnico Carlos Sanabria me pidió que juegue en ese puesto y le marqué al “Loco”. ¡Nde!, chembo py’aropu mo’ã (casi me mató de infarto). Encima estaba en su mejor momento. Eja hese (pegate a él) me decía el DT, mamota pio, ndaipóri ohupyty’arã chupe, el número de su camiseta lo que veía. Y cuando venía con pelota dominada si que, peor”, recordó.

El orgullo de haber defendido al Gumarelo… Olimpia y otros

Martínez recordó que “en cada partido era candidato para la tarjeta amarilla, porque en esa época se jugaba muy duro”. Y también dijo sentirse orgulloso de haber jugado en grandes equipos.

“Es un orgullo para mí haber estado en esos clubes. Nacional, Libertad, Luqueño y Olimpia, donde tuve la suerte de ser campeón y compartir con grandes jugadores. El fútbol me dio grandes amigos, no tengo contacto con todos, pero sí con muchos de ellos”, concluyó.

Si bien en su época no se ganaba las sumas millonarias como hoy, Héctor reconoció que gracias al fútbol pudo hacerse de casas y comodidades.