Con apenas 20 años, el ofensivo Isaías Franco ya pasó por momentos durísimos del fútbol y la vida. Atendé su historia.

• Por Arturo Rojas C.

Contra todo y todos. Isaías Franco (20) es un ejemplo de superación para muchos jóvenes que están luchando por dedicarse al fútbol. No solamente por lo que hace en la cancha, sino por todo lo que tuvo que aguantar fuera de ella para seguir firme con su sueño.

“Peque”, tal como se lo conoce al futbolista del General Caballero de Mallorquín, no va para nada con su personalidad. En mano a mano con Crónica contó de todo. “Dos lesiones tuve en las inferiores, y muy feas, la primera fue cuando me rompí la tibia y el peroné, algunos decían que yo no iba a poder jugar más, que ya me tenía que dejar nomás ya del fútbol, y yo no sabía qué hacer, tenía solamente 15 años cuando eso”, recordó Franco, que se lesionó gravemente en un amistosos defendiendo los colores de Guaraní, club que es dueño de su pase hasta hoy día.

Pero menos mal la familia siempre estuvo para apoyar en ese momento. “Mi familia y mis amigos me apoyaron bastante, me decían que iba a volver más fuerte, que mi pierna iba a ser más grande, me animaron mucho porque esa primera semana yo no quería saber más nada. Sin todo ese apoyo legalmente no sé qué iba a ser de mi”, agregó el ofensivo.

Para Franco, rendirse después de aguantar la lesión no era una opción, por más que en el camino se volvió a cruzar otro obstáculo desafortunado. “Después de eso me rompí mi clavícula, dije luego che jeýma pio la añelesionaba, me lamenté bastante, me dio rabia, pero ya estuve más fuerte mentalmente para superar ese momento.

De esa lesión me recuperé más rápido, no estuve tanto tiempo fuera de las canchas”, dijo el crack del General.

Con 20 años, superando lesiones y otros dramas más, el “Peque” demuestra que está para grandes cosas en la vida y el fútbol.

Franco en el “Indio”, desde los 13 años

A muy corta edad, Isaías Franco ya quedó en Guaraní, y comentó que su experiencia en el club fue muy buena por la competencia. “Siempre el club tuvo muchos valores y se nota eso en la Primera, eso también me ayuda mucho para crecer como futbolista”, dijo el extremo ofensivo que está a préstamo en el rojo mallorquino, líder de la Intermedia, hasta fin de año.

“Me hice el peinado de Merlini porque me gusta como juega”

En las inferiores siempre uno debe tener un espejo futbolero. Y de Isaías Franco es Bautista Merlini, hoy en Libertad, pero que tuvo un gran paso por Guaraní. En la “toldería” el “Peque” compartió bastante con el argentino.

“Es chiquito, intenta jugar y gambetear siempre, me sentí identificado con él, entonces me hice el peinado de Merlini porque me gusta como juega, por lo menos eso de él quería tener”, contó entre risas.

Después se tuvo que aguantar las bromas de los muchachos porque decían que eran hermanos. “Es muy buena onda, me regaló para mi botín y todo” cerró.

Jugar en la Primera y la Albirró

Cuando consultamos a Isaías Franco sus dos grandes sueños en el fútbol, no dudó ni un segundo en contestar. “Consolidarme en la Primera, ahora pienso solamente en seguir en General Caballero y mostrarme el año que viene entre los más grandes, tener continuidad”, dijo el crack.

En tres partidos jugados en la Intermedia ya lleva un gol anotado el “Peque”. Además de eso, dijo que su otra gran meta a cumplir. “Ponerme la camiseta albirroja, como todo paraguayo, ya estuve en el Sub 20 y eso ya me alegró muchísimo”, dijo Franco.

Con un compañero especial

Isaías Franco también soportó momentos duros familiarmente, como el fallecimiento de su hermano (Josías). “Siempre antes de cada partido le pido que me vaya bien, le digo que me acompañe y que no me falte nada, es mi ángel de la guarda por así decirlo, y todo lo que haga es por él”, dijo el capiateño.

Franco, hijo de Roberto Franco y Reinalda Almada, está en todas sus redes sociales con el nombre de Josías, otro homenaje más de “Peque”, más allá del fútbol. “Una vez puse así y nunca más cambié, le tengo muy presente”, remató nuestro entrevistado.