PALABRA SANTA. El expelotero Darío Caballero rememoró la manera en la que se sienten dentro de la piel de un pelotero las horas previas al partido más importante de nuestro medio. Jugó en Cerro Porteño y Olimpia 

El sueño de todo pelotero paraguayo es jugar en uno de los equipos grandes de nuestro fútbol, pero tener el privilegio de chutar para los dos grandes es una suerte de pocos. Que te lo cuente el expelotero Darío Caballero (40 años), que supo chutar en Cerro Porteño y Olimpia. 

El exdefensor charló con Crónica y opinó acerca del clásico de mañana, diciendo que “el clásico va a ser un partidazo, por que los dos equipos tienen un plantel de categoría. El que cometa menos errores será el ganador. El que pierda, prácticamente se bajará de la lucha del Clausura, así que hay mucho en juego y tendrán que salir a jugarse”.

Consultado acerca de cómo vive un jugador la semana previa al clásico dijo que es “algo emocionante. El primer día de práctica antes del clásico ya te das cuenta del ambiente, se siente ese entusiasmo, esas ganas de jugar. Uno cuando entrena ya quiere que llegue el día del partido nomás ya” agregó en medio de su buena onda de siempre.

Sobre cómo mantener la concentración y tranquilidad en el partido entre los archirrivales, expresó que “muchas veces la ansiedad y el nerviosismo te juega en contra y en eso también será clave el entrenador en hablarle a su dirigidos. El clásico siempre es especial. Me daba piel de gallina jugarlo, era increíble”, soltó mientras dejaba escapar una risa de esos nervios que sentía en aquel entonces. 

ACTUALIDAD

Darío Caballero se va abriendo camino como DT. Hace poco estaba dirigiendo al Colón de J. Augusto Saldívar.