POR OSCAR PATIÑO RIVEROS

El futbolista de Fernando de la Mora habló con Crónica y reveló cuáles son sus sueños, entre ellos contó que anhela regalarle un establecimiento ganadero a sus padres

El fútbol es un deporte donde a lo largo de los años hemos visto a futbolistas dar sus primeros pasos en medio de grandes precariedades y llegar a la cima del mundo, y tal vez el más célebre ejemplo es el de Diego Armado Maradona, quien nació en el seno de una familia muy humilde y gracias a la “pelota” tocó el cielo con las manos.

En nuestro país existen cientos de jóvenes que con mucho esfuerzo están dando sus primeros pasos en el deporte rey y sueñan con llegar a lo más alto, que la fama toque sus puertas, firmar grandes contratos y ayudar a la familia a tener una estabilidad económica.

Abel Antonio Bareiro Samaniego (20 años) es uno de ellos. El atleta de Fernando de la Mora conversó con Crónica sobre sus inicios, las grandes dificultades que enfrentan los deportistas del ascenso, el bajo salario que tienen, el apoyo de su familia y el regalo que sueña hacerles a sus padres.

“Algunas personas piensan que la vida del futbolista es fácil, pero ellos solo ven cuando te va bien; ven los resultados, pero nunca ven todo el esfuerzo que hay detrás de cada jugador”, comenzó diciendo el delantero nacido en Asunción el 31 de mayo de 2001.

Comenzó a jugar en la Escuela de Fútbol del Club Atlético Villa Elisa, luego pasó a la Escuela de Fútbol de Sol de América, más adelante se fue al Club Arcadia de la Liga del Sud y de allí a los 16 años fichó por Fernando de la Mora, equipo que actualmente compite en la categoría Intermedia.

Abel tiene varios sueños, jugar en Primera, vestir la casaca de uno de los grandes de nuestro fútbol, ser llamado a la selección y comprarles una estancia a Hilarión Bareiro y María Samaniego, sus padres.

“Algunas personas piensan que la vida del futbolista es fácil, pero ellos solo ven cuando te va bien; ven los resultados, pero nunca ven todo el esfuerzo que hay detrás de cada jugador”

“Quiero que ellos ya dejen de trabajar”

Abel admitió que sin el apoyo de su familia nunca hubiera hecho realidad su sueño de jugar al fútbol, el respaldo de sus hermanas, hermanos y sobre todo de sus padres fue muy importante.

“Sin mi familia yo jamás hubiera llegado hasta aquí. Mi papá (Hilarión Bareiro) hace de todo, trabajos de albañilería, jardinería, etc. Y mi mamá (María Samaniego) es ama de casa. Quiero que ellos ya dejen de trabajar, por eso deseo regalarles una estancia para que ellos tengan sus animales allí”, remarcó.

“El profesor Hernán Acuña marcó mi carrera”

El futbolista de 20 años recordó que el técnico que marcó su carrera hasta el momento fue Hernán Acuña, ya que gracias a él se quedó en Fernando de la Mora, luego de hacer varias pruebas.
“El profesor Hernán Acuña marcó mi carrera, fue y es muy importante para mí. Cuando yo fui a probar a Fernando de la Mora eran cinco los técnicos que debían dar su ok para que yo me quede y uno de ellos era Hernán Acuña. Él apostó por mí y eso nunca lo voy a olvidar”, acotó.

“Yo no tomo, no fumo y no farreo”

El cuidado personal es fundamental para cualquier deportista y Abel lo sabe, en este sentido dijo que es consciente de lo que debe hacer y lo que no. “Yo sé muy bien lo que significa la vida de un jugador, es difícil y uno debe tener mucha disciplina. En mi caso yo no tomo, no fumo y no farreo. Y si salgo de vez en cuando no amanezco por la calle. Además me cuido mucho en la comida, pero no es sencillo porque mi sueldo no es alto y los gastos que tiene un jugador son enormes”, apuntó.

Estuvo a punto de dejar todo porque no cobraba

“Muchas veces quise dejar el fútbol porque en los clubes donde estaba no me tenían en cuenta y en los últimos tiempos no cobraba y es difícil entrenar, cuidarte y alimentarte bien si no te pagan. El año pasado por ejemplo no hubo campeonato de la Intermedia por la pandemia y yo trabajé en albañilería con mi papá, de la plata que gané le pagué a mi nutricionista y a mi preparador físico, porque si no me cuido no tengo ninguna posibilidad de llegar a ser un gran profesional”, sentenció.